sábado, 15 de noviembre de 2014

Sinopsis...
Que sucede cuando la envidia llega a su limite?
Cuando la locura llega a ti?
Y si no la puedes detener?
Y si ya no sabes que hacer?
Envidia, dolor, angustia, es lo suficiente para ser un psicópata.






















Veía a mi hermana, mi gemela, es igual a mi, solo que "más bonita", como? No se. Estúpida sociedad.
Ella estaba en la sala de espera, yo la veía desde la ventana de la oficina del psicólogo. Tengo seis años, que hago aqui?
-  Lo siento- le dijo el loquero a mis padres- tiene un grabe grado de envidia. La han enviado aqui, no por locura, si no que si sigue así podrá llegar a la locura.
Mire a mi madre que miraba con angustia a mi padre. No entendía eso de envidia, solo sabía que mi gemela era mejor físicamente, mejor en clases, más social, y para colmo mis padres la querían más.
- Amara- llamo mi mami- ven un momento.
Deje de ver a mi " perfecta" hermana y me encamine al escritorio.
- Bueno pequeña, quiero que hables con el doctor. Te dejaremos sola por un momento.
Después de eso salió con mi padre.
- Quiere saber si estoy loca?- pregunte mientras me sentaba .
- Bueno... Mmm...- se veía nervioso- no se si estas loca, solo te quiero hacer preguntas, pequeña.
- Pequeña?- pregunte apunto de explotar- pequeña? No estoy aquí por que quiero, estoy aqui por ella- dije mientras señalaba la ventana- ella se cree perfecta, no lo soportó- sentía como las lágrimas corrían por mis mejillas y el loquero me veía sorprendido- Adalia es lindo, inteligente, y tannn cariñosa, mis padres la abrazan mas, la quieren más...- mi voz disminuyó - A ella la aman más...
- Claro que te aman- dijo el loquero- solo que tu no te dejas amar...
- Doctor como se llama?- pregunte mientras me quitaba las lágrimas.
El sonrió y se me acerco- Daniel- dijo mientras me abrazaba.
Y supe que el si me quería, o por lo menos eso creía...
~~~*~~~
4 años después...
- Deja me... Deja me!- grito Adalia- mamá, papá- grito mientras lloraba.
- Callate Adalia- le dije ya harta, mientras ella gritaba para que le abriera la puerta del armario, donde "accidentalmente" la metí y "accidentalmente" se encerró.
- Que sucede!- grito mi padre mientras corría hacia mi- que paso Amara?- pregunto angustiado.
- Papá...- llamo mi hermana- Ella me encerró- dijo mientras lloraba, y supe por la mirada de mi padre que estaba en problemas.
- Yo... Yo... ¿Lo siento?- pregunte.
- Dios...- dijo el, me empujó y saco a mi hermana del armario- por que lo hiciste?- preguntó.
- Ella me dijo que ustedes la aman más- dije yo molesta.
- Ve a tu habitación. Ya!- grito mientras algo se rompía en mi corazón.
Salí corriendo a mi cuarto y me encerré.
- Maldita hermana!- grite al vació- Maldita...
Solloce y empecé a destruir mi cuarto. Me empecé a rajullar la cara, grite y grite, y me di cuenta que mañana vería a Daniel como todos los meses durante estos cuatro años.
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- Daniel- dije al verlo, aun creía que el me quería, el tomo el lugar de mi padre, para el era yo, en nuestro mundo yo era la protagonista, o por lo menos eso me gustaba creer.
- Hola pequeña- estúpido sobrenombre.
- Tengo diez años, no soy tan pequeña- dije con cierta molestia en mi voz.
- Lo se... Lo se- dijo el- por qué lo hiciste?- siempre iba directo al punto.
- Me dijo que mis padres la querían más a ella que a mi- dije con tristeza.
- Y no es lo que tu crees?- pregunto.
- Fue peor escucharlo de otra persona- dije mientras las lágrimas se deslizaban por mis mejillas.
~~~*~~~
Tres años después.
-Y que? Maldita perra- dijo Adalia- soy mas linda, más inteligente, y el me quiere a mi- dijo.
- Me lo robaste!- grite, mientras me acordaba de ella y Alex mientras se besaban- Sabias que me gustaba- dije llorando.
- Si bueno... No me importa, dime quien es la inteligente, bonita, cariñosa, y no esta loca? Yo- dijo ella mientras sonreía y ese fue el momento en que explote.
Molesta con el mundo, con mis padres, con mi familia, y con mi gemela... agarre a Adalia por el cuello y comencé  a ahorcarla, ella gritaba y me pegaba, con la vista borrosa la seguí ahorcando, cuando estaba inconsciente corrí hacia la cocina y busque un cuchillo largo y afilado.
Con cuchillo en mano camine hasta el cuerpo de mi hermana, era igual a mi, me mire en el espejo de la habitación y no me reconocí, en mis ojos no había dolor ni ninguna emoción, estaba vacía...
Penetre el cuchillo en el cuello de mi hermana y algo en mi comenzó a disfrutar la sensación de sangre en mis manos, por fin años de envidia quedaban en mis manos para destruir. Con el cuchillo empecé a hacer una línea en el estómago de Adalia la sangre me salpicaba y con una sonrisa macabra le corte la cabeza.
- Ahora quien es mas bonita?- le pregunte a la cabeza de mi hermana que colgaba en mis manos.
- Qué sucede?- escuche un grito.
-  Qué...?- vi a mis padres en la escena y solo pensé en algo... Muerte.
Lance el cuchillo hacia mi padre que justo le callo en el estomago, mi madre grito y vociferó a mi padre un "te amo". Solté la cabeza de mi hermana y camine hacia mis padres, saque el cuchillo del estomago de mi padre y lo enterré en el pecho de mi madre, los dos se encontraban en el suelo.
- Los amo... Pero ustedes no a mi...- dije.
Con el cuchillo le corte la cabeza a mi madre y a mi padre le corte una mano, me encantaba verlos sufrir tanto como yo sufrí en estos años. Mi padre estaba inconsciente y con toda mi fuerza le enterré el cuchillo en el pecho, justo en el corazón, metí mi mano en el agujero y toque su interior, literalmente,  cuando saque mi mano no me resiste a la merme los dedos, enseguida sentí el sabor a hierro en mi boca y eso fue el paraíso. Le corte la cabeza.
Agarre las tres cabezas y busque una caja, al encontrarla las metí en esta y escribí una carta.
" Ahora te parezco pequeña?"
Escribí en ella, al siguiente día la envíe, Daniel se sorprendería.
~~~*~~~
Cuatro años después.
Mire mi antigua cuarto, hace cuatro años yo estaba aqui con la cabeza de Adalia en mis manos. Agarre mi abrigo y salí de esa casa.
Llegue a mi refugio, lejos de la ciudad... Al entrar siempre veía las cabezas en descomposición de mas de diez personas... Mi mama, papa, hermana, Daniel, Alex, y personas que solo se cruzaron conmigo en un mal día.
Busque mi hermoso cuchillo y lo escondí en mi bolsillo, el mismo que utilice la primera vez.
Camine por las calles en busca de mi próxima presa, me encantaba verlas sufrir, y verlas rogar me en su agonía, amaba como se sentía su sangre en mis manos, y su sabor era lo mejor, era como tener el paraíso. Hoy era día de san valentin, veía a las parejas reír y besarse, la envidia corría por mis venas y quería destruir todo a mi paso.
La calle se despejo, las parejas irían a tener sexo, pero vi a una linda pareja sola en el parque, se veían tan bien, con una vida por delante.
Me acerque por detrás y con un movimiento rápido saque el cuchillo y lo metí en el cuello del joven, la chica miro todo con horror y cuando me miro dijo lo mas terrible...
- Adalia?- pregunto.
Con mi furia y recordar a mi hermana saque el cuchillo del cuellos del chico y lo enterré en un ojo de la chica, mientras se desangraba agarre su cuerpo y camine con ella por las calles, llegue a un bosque cercano. Desnude completa a la chica y la deje, busque un palo y empale a la chica, vi como gritaba y lloraba, mi disfrute era máximo y con una sonrisa macabra...
- Soy Amara- dije y me fui.
~~~*~~~
Tres años después.
Estaba en mi habitación pensando, me imagine a mi hermana a mi lado, sentía que algo me hacia falta, lloraba y sentía esas lágrimas en mis mejilla que hace años las había transformado en sonrisas macabras, vi la repisa con mas de cincuenta cabezas y la ultima no dejaba de mirarme.
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24 horas antes.
Me encontraba con Rick en su carro, el me miraba de arriba a bajo. Acepte salir con el por dos razones, no me conocía y era nuevo en la ciudad.
- Y que haces para vivir?- pregunto
*Matar personas y quitarle el dinero de la cartera, mientras saboreo su sangre*
- Trabajo como mesera- respondí tranquilamente.
- Eres muy sexy- dijo. Sabia que estaba ebrio pero en ese momento me sentí pequeña...
- Gra...gracias- dije tartamudeando.
El se me acerco y trato de besarme, nunca había besado y no seria con el borracho , lo empuje y el me miro de una manera... Macabra.
- Que te pasa pequeña?- pregunto.
- Alejate- le dije con firmeza.
- No, no quiero- dijo y me agarro las muñecas y empezó a besarme, me quería ir, pero no podía, con una mono libre me empezó a quitar la camisa, con un movimiento me aleje de el, busque mi cuchillo con rapidez y lo enterré en su estomago, me miro con temor y ahora era yo quien reía.
Saque el cuchillo y lo deje a mi lado en el asiento,empecé a sacarle los pantalones el solo me miraba, estaba en shock. Con su pene afuera agarre el cuchillo y lo castre. Se sentía también y en ese momento grito.
- Que te parece?- le dijo con su pene en mi mano.
Lo metí en su boca y el me miraba sin entender, estaba en un viaje de la vida a la muerte. Le enterré el cuchillo en un ojo y lo saque, era azul. Me lo metí en la boca y su sabor me lleno, sabia tan bien, era delicioso...
Salí del auto y me fui, mientras se desangraba.
Creo que si Batman algunas vez hubiese probado un ojo humano, hubiese matado a Joker en la primera película.
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Actualidad.
Veía ese ojo azul, que busque después de una hora de su muerte, deje que se desangrara tranquilamente, pero algo me hacia querer correr de aquel tétrico lugar, no encontraba la paz como antes hacia, me sentía confundida y muy sola, por primera vez en años me sentía mal...
Me mire en el espejo y ya en mis ojos no había un vacío, había dolor. Me vi igual que a mi hermana, y pareció como si el mundo me dijera ¡Matate!.
Busque mi lindo cuchillo y me pare al frente del espejo. Sonreí macabra mente y con el dolor en mis ojos, la angustia en mi alma y la envidia en mi corazón, enterré el cuchillo en mi pecho, con los pocos movimientos que aun me quedaban toque mi pecho y recogí gotas de sangre en mi mano, lamí mi mano y supe que mi sangre era más dulce que cualquier otra que allá probado.
Y caí en la oscuridad, para nunca despertar...